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Memoria SERIDA 2016

Resultado Proyecto

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Implicaciones del pastoreo del vacuno en la conservación de la biodiversidad en los pastos de Asturias

Referencia: RTA2012-00110-00-00. Organismo financiador: Ministerio de Economía y Competitividad. Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA). Cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Importe: 80.040 €. Duración: 2013-2016.

Equipo investigador

Rocío Rosa García. SERIDA
Rafael Celaya Aguirre. SERIDA
Urcesino García Prieto. SERIDA
Felipe Fernández García. Facultad de Geografía e Historia. Universidad de Oviedo
Mariecia Fraser. Institute of Grassland and Environmental Research IGER (Gales)
José Ramón Verdú Faraco. Universidad de Alicante
José Antonio González Díaz. GLA Alto Nalón
Luis Miguel Mendes Ferreira. Universidade de Trás-os-Montes e Alto Douro (Portugal)

Resultados y conclusiones

Se analizó el papel del pastoreo en la dinámica de la biodiversidad de los pastos y bosques naturales asturianos, utilizando como modelos dos zonas con tradición ganadera y características diferenciadas: Priesca (dominada por bosques de frondosas en la zona costera) y los puertos de Agüeria, situados en el Parque Natural de las Ubiñas-La Mesa a 1600-1800 m de altitud y tapizados de brezales de Calluna y pastos dominados por Agrostis, Festuca y Nardus.

Los estudios poblacionales, de la cabaña ganadera y paisajísticos desde los años 50 hasta la actualidad revelaron que el pastoreo juega un papel clave en el modelado del paisaje y los recursos naturales en ambas zonas y responde a dinámicas singulares derivadas de las características de cada zona así como a factores comunes como el despoblamiento o el avance del matorral o bosque.

En Priesca la población desciende un 65% entre 1956 y 2011, dejando una pirámide actual (Fig. 1a) que refleja graves dificultades de relevo generacional que comprometen la viabilidad poblacional futura así como el mantenimiento de las actividades ligadas a la conservación del paisaje y sus recursos, como la ganadería (edad media de titulares de las explotaciones es 55 años). La cabaña bovina evolucionó desde una orientación mixta complementada con agricultura de subsistencia hacia una lechera como respuesta a la creciente demanda urbana a partir de los años 50. Tras la entrada en la CEE, la inadaptación del modelo por los hándicaps del territorio (pendientes, accesos, parcelación, minifundismo, etc.), se traduce en una reducción del 60% del número de explotaciones, y la posterior reconversión de las supervivientes a la producción cárnica (en 1986 el 95% eran lácteas, en 2015 sólo lo son el 16%). Los prados, clave para el desarrollo ganadero, coexistieron con amplias áreas de bosque y cultivos en los años 50 (Fig. 1b). Para el año 2011 la superficie de cultivos se redujo un 98% así como los prados (68%) mientras aumentan los bosques nativos (110%), las plantaciones de eucalipto (1636%) y los matorrales (337%). La compactación del paisaje incrementa riesgos como los incendios, la expansión de enfermedades animales o vegetales, pérdida de heterogeneidad ambiental y biodiversidad. 
 


Figura 1. Pirámide de población actual en la parroquia de Priesca y en el concejo de Villaviciosa (a) y cartografía de la evolución del paisaje entre los años 1956 y 2011 (b)

En los puertos de Agüeria la población decrece un 80% y las explotaciones un 62% entre 1956 y 2016. La población actual está envejecida (Fig. 2) y limitada para mantener la actividad ganadera (edad media de los titulares de las explotaciones: 58 años). Los puertos albergaron rebaños multiespecificos locales y trashumantes de merino hasta 1986; posteriormente desaparecen los trashumantes y los locales se reorientan a vacuno y equino de carne.
 


Figura 2. Pirámide de población actual en las parroquias con derecho a pasto en los puertos de Agüeria y en Quiros (a) y cartografía de la evolución del paisaje entre los años 1956 y 2011 (b).


La desaparición de los pequeños rumiantes y la dominancia de vacuno y equino concurren con la expansión de las superficies de piornales (incrementan un 114%) y acebedas (11%), mientras decrecen los brezales (34%) y los prados (20%). Las comunidades cambian en superficie y en su organización interna, así las acebedas densas incrementan un 39% mientras las ralas decrecen un 3%. En paisaje del puerto en su conjunto se fragmenta debido a la aparición de nuevas manchas de ciertos tipos de cubierta, como los piornales (+229%) y acebedas ralas (60%) y densas (16%).

Este proyecto ha contextualizado la relevancia de cada cubierta en cuanto a la biodiversidad que alberga. Para ello abordó el primer análisis detallado de la fauna artropodiana local, incluyendo grupos con requerimientos y respuestas biológicas variadas. Se estudiaron 95933 artrópodos de suelo pertenecientes a 5 clases y 64 familias. La composición de las comunidades difirió (ANOSIM, R: 0,36; P<0,001) entre las dos fincas, así como entre las diferentes comunidades vegetales dentro de cada finca (ANOSIM: R = 0,59; P<0.001 para Agüeria y ANOSIM: R: 0,98; P<0.001 para Priesca). Las mayores abundancias de artrópodos (325 individuos/trampa) se detectaron en los prados costeros frente al resto de comunidades vegetales (P<0,001) excepto los prados de los puertos (con 268 individuos/trampa). Los prados de ambas zonas albergaron la mayor riqueza florística y especies exclusivas de cada zona. Las capturas en los brezales (131 individuos/trampa) superaron a los bosques costeros (88), piornales (43) y acebedas (40). La abundancia no varió entre zonas pastadas y no pastadas en ninguna de las dos fincas. La riqueza de familias no difirió entre tipos de cubierta, pero sí interaccionó con el pastoreo: la riqueza fue mayor en los brezales no pastados que en los pastados (P<0,05), mientras en los prados y bosques costeros no hubo diferencias significativas entre tratamientos.

Un análisis detallado de las familias de artrópodos reveló respuestas heterogéneas al pastoreo y preferencias por distintas cubiertas vegetales. Dentro de la fauna coprófaga, la abundancia de la familia Hydrophiliidae fue mayor en zonas pastadas que en no pastadas (P<0,001) y en los prados de ambas fincas que en el resto de comunidades P<0,001). La abundancia de la familia Scarabaeidae (dominada por especies coprófagas) fue mayor en zonas pastadas que en no pastadas (P<0,05), abundando también más en los prados y brezales montañosos (sobre todo en prados costeros) que en otras cubiertas (P<0,05). La abundancia de arañas lobo no difirió entre tratamientos, pero si entre tipos de vegetación (P<0,01), proliferando en prados y brezales frente al resto. Por el contrario, la abundancia de otros grupos como los milpiés (Familia Julidae) no difirió entre cubiertas vegetales o tratamientos de forma global, pero en Priesca abundaron más en bosques que en prados (P<0,05).

CONCLUSIONES
La ganadería, a través de la selección de dieta y el comportamiento en pastoreo de las diferentes especies/razas, ha tenido un papel fundamental en el modelado del paisaje y de la biodiversidad. El receso y transformación de la cabaña ganadera concurren con una progresiva tendencia a la homogeneización del paisaje que compromete a la biodiversidad.

Para conservar la biodiversidad se deben preservar los hábitats, en este caso expresados a través de las diferentes manchas de vegetación y su fauna/flora asociadas. Si bien los bosques nativos están en fase de recuperación, otros hábitats no menos importantes como los prados y ciertos matorrales se encuentran en recesión, aunque albergan una destacada biodiversidad. Es necesaria por tanto una gestión integrada de las cubiertas a escala del paisaje de forma que se maximice la diversidad biológica y paisajística.

La evolución de la población humana en las dos zonas compromete seriamente el desarrollo sostenible de las mismas si éste recae en el mantenimiento de las actividades tradicionales que conservan la biodiversidad y la calidad de vida de la población rural. En las zonas bajas el abandono y la proliferación de ciertas cubiertas como las plantaciones de eucalipto no han mejorado las condiciones ni ambientales ni socioeconómicas. En la montaña, la población actual residual y envejecida tiene serias limitaciones para afrontar retos clave para el futuro del espacio natural protegido como es la conservación de paisajes biológicos y culturales y el desarrollo sostenible de las poblaciones rurales. La localización de los puertos dentro de la Reserva de la Biosfera de Las Ubiñas-La Mesa reafirma la necesidad de actualizar su plan de manejo teniendo en cuenta las dinámicas ambientales y socio-económicas detectadas durante este proyecto.

 

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