Resultado Proyecto

Optimización del aporte dietético de nitrógeno para mejorar la gestión de purines, aplicación de herramientas para evaluar el balance de N y P entre la dieta y el purín y mejora del impacto medioambiental mediante la neutralización de olores

Referencia: RTA2015-00058-C06-02. Organismo financiador: Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA). Ministerio de Economía y Competitividad. Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Importe: 120.000 €. Duración: 2017-2021.

Equipo investigador

Fernando Vicente Mainar. SERIDA
Adela Martínez Fernández. SERIDA
Gregorio Salcedo Díaz. CIFP "La Granja" (Cantabria)

Avance de resultados

La vaca utiliza para la síntesis de leche sólo el 25-35% de la proteína de la dieta, excretándose por heces y orina el restante, por lo que es una fuente de contaminación de NH3 y N2O. La reducción en el aporte de nitrógeno dietético puede ser un modo efectivo de disminuir las excreciones de nitrógeno y las subsiguientes emisiones de NH3. Esta reducción debe optimizarse para no inducir un descenso en el potencial de producción de los animales. Por otro lado, en el proceso de ensilado de forrajes, las leguminosas son más susceptibles que las gramíneas a sufrir proteólisis debido a su mayor contenido en proteína. Sin embargo, no todas las leguminosas tienen la misma tasa de tasa de proteólisis.

Con el objetivo principal de mejorar la calidad del purín para ser utilizado como fertilizante orgánico, se realizaron dos experimentos secuenciales. El primero pretendía determinar el nivel óptimo de aporte de nitrógeno dietético (17, 15 o 13% de proteína bruta en la ración) necesario para vacas produciendo más de 30 kg de leche al día. Una vez establecido el nivel óptimo de proteína en la ración, el segundo ensayo evaluó dos ensilados de leguminosas con diferente tasa de proteólisis (guisante o haba) además de ensilado de raigrás italiano como control. Ambos ensayos se realizaron mediante un diseño de doble cuadrado latino 3x3 utilizando seis vacas en el segundo tercio de lactación en cada uno de los experimentos.

La ración elaborada con el nivel más bajo de proteína no afectó a la producción ni a la composición de la leche (Tabla 1). Además, disminuyó significativamente la excreción de nitrógeno, tanto amoniacal como total, por la orina, no viéndose afectada la excreción de nitrógeno a través de las heces. Por lo tanto, vacas produciendo más de 30 kg de leche al día pueden cubrir sus necesidades con dietas con un 13% de proteína bruta, disminuyendo así las pérdidas de nitrógeno a través de la orina.

Tabla 1.-. Ingestión de nutrientes, producción de leche y excreción de heces y orina en vacas lecheras alimentadas con diferentes concentraciones de proteína bruta.

En el segundo ensayo se elaboraron raciones con un 13% de proteína con los ensilados mencionados. La ración elaborada con ensilado de haba desvió la excreción de nitrógeno hacia las heces, con una mayor proporción (P<0,05) de nitrógeno total en heces que la dieta con ensilado de guisante. Por el contrario, con esta dieta la excreción de nitrógeno amoniacal a través de la orina se duplicó (P<0,01) respecto a la ración elaborada con ensilado de haba. Asimismo, el nitrógeno total excretado en orina con la dieta de ensilado de guisante fue superior (P<0,001) que con las dietas de ensilado de haba o de raigrás (Tabla 2). Se puede concluir que la principal vía de excreción del nitrógeno dietético aportado por ensilados de leguminosas es la orina, metabolizándose la proteína del ensilado de guisantes hacia la producción de nitrógeno amoniacal en mayor medida que en el ensilado de haba.
 

Tabla 2.-. Ingestión de nutrientes, producción de leche y excreción de heces y orina en vacas lecheras alimentadas con raciones con dos ensilados de leguminosas con diferente tasa de proteólisis (guisante o haba) y ensilado de raigrás italiano como control.